Kirchneristas y opositores apoyan un proyecto de ley cavernícola
Una persona que acusara de genocida al genocida Von Wernich o de paidófilo al paidófilo Julio Grassi podría ser condenada a dos años de prisión. Esto, si prospera un proyecto de ley actualmente en discusión en la Comisión de Relaciones Exteriores y Culto de Diputados, Su autora es la diputada evangélica Cynthia Hotton, que asumió por el PRO pero ahora fundó un bloque unipersonal homónimo de su agrupación político-religiosa: Valores Para Mi País (VPMP). VPMP forma parte del interbloque Propuesta Federal, que encabezan Federico Pinedo y Francisco de Narváez.
Créase o no, el proyecto de ley de libertad religiosa de Hotton incorpora un nuevo capítulo al Código Penal bajo el título de "Delitos contra la libertad religiosa y de conciencia" (art. 31). Crea diversos tipos penales, entre otros uno que prevé prisión de seis meses a dos años para quien "agrediere de hecho o de palabra a un ministro de una confesión religiosa reconocida en ocasión del ejercicio de actos propios de su ministerio o por el hecho de serlo" (Página/12, 2/9). ¿Quién podría negar que Von Wernich o Grassi estaban en el ejercicio de su ministerio cuando uno bendecía los vuelos de la muerte y el otro abusaba de menores si la Iglesia, a la fecha, ni siquiera les ha retirado su estado sacerdotal?
Quien piense que Hotton tiene las facultades mentales alteradas debe saber que esta buena amiga del vicepresidente Cobos tiene adherentes en casi todos los bloques parlamentarios. Firmaron la iniciativa Rubén Sciutto y Antonio Morante, del Frente para la Victoria; Juan Carlos Morán y Fernando Iglesias, de la Coalición Cívica; Federico Pinedo, de PRO; Daniel Katz, de Consenso Federal; y Luciano Fabris y el extinto José Ignacio García Hamilton, de la UCR. No es un dislate aislado. Es un intento de intimidación que se propone recortar la libertad de expresión y de crítica a instituciones atravesadas por graves delitos, mientras enloquecen a la humanidad predicando, por ejemplo, que una fuerza suprahumana de distintos alias diseña el destino de cada vida o que hay mujeres que paren vírgenes.
El proyecto responde a "una antigua reivindicación de las iglesias evangélicas", que se han convertido en la primera minoría religiosa (9% de la población) y pretenden que se les otorgue una personería jurídica especial como "objetos religiosos". Como siempre, las cuestiones de fe envuelven cuestiones de dinero. Entre otros beneficios, los "objetos religiosos" estarían eximidos del pago de impuestos.
Hotton dice que el cardenal Jorge Bergoglio avala su proyecto -no la desmintió- y que la respaldan la Alianza Cristiana Evangélica de la República Argentina (Aciera), parte de la comunidad judía ("tiene buena afinidad con el rabino Sergio Bergman") y la Iglesia Ortodoxa Rusa, entre otras.
Hotton es una opositora militante a la legalización de las parejas del mismo sexo, a la reglamentación de los abortos no punibles y a la despenalización de la tenencia de drogas para uso personal, entre otros temas. El odio religioso contra las mujeres, los adictos y los homosexuales es indisociable del odio contra las libertades más elementales. Debe suspenderse todo subsidio estatal a estas agencias del oscurantismo y, como una medida indispensable de protección a la infancia y a la juventud, deben ser excluidas de toda función educativa y asistencial.
No hay comentarios:
Publicar un comentario