Leon Trotsky

"Sin una organización dirigente la energía de las masas se disiparía, como se disipa el vapor no contenido en una caldera. Pero sea como fuere, lo que impulsa el movimiento no es la caldera ni el pistón, sino el vapor."




25/5/10

bicentenario

Como hace doscientos años...

En su visita a España, la Presidenta criticó “las recetas recesivas” en Europa, pero no mencionó que acaba de votar, en el FMI, a favor del ajuste para Grecia (ver Prensa Obrera Nº 1.129). Pero antes de salir para Europa, la Presidenta ya sabía que la crisis mundial estaba golpeando de nuevo a Argentina –luego de la salida de 40 mil millones de dólares que se produjo entre mediados de 2007 y finales de 2009, y de la caída del 4% del producto interno en 2009. Es mentira que Argentina sorteará la crisis que se manifiesta en Europa, que es el segundo comprador de las exportaciones nacionales. Menos aún cuando a esa crisis ya se ha incorporado Brasil, el primer mercado extranjero de la producción argentina, cuya Bolsa se ha derrumbado en la última semana.

“Canje” inútil

Estos acontecimientos golpearon a la baja a los bonos de la deuda pública de Argentina que, de este modo, quedaron en una posición aún más vulnerable que los títulos de Grecia –que ya no tienen compradores en el mercado mundial. Es así que dejó tambaleando el nuevo canje de deuda con el que los K pretenden reanudar el endeudamiento nacional y, por esta vía, dar oxígeno a un supuesto plan de reactivación. El gobierno tuvo que resignar la pretensión de que los bancos que gestionan el canje consigan un préstamo inmediato por mil millones de dólares. Pero hasta el propio canje podría concluir en un fracaso –y con esto la intención de cerrar un acuerdo con el Club de París.

Adicionalmente, la crisis europea está por voltear los precios internacionales del petróleo o los cereales, sobre los que se basa el pronóstico de un superávit comercial elevado.

Desesperación

Todo este nuevo panorama explica la acentuación de las medidas de protección contra la producción extranjera adoptadas en las últimas semanas. El derrumbe del euro y la caída del real describen una perspectiva de guerra comercial. Pero Argentina no puede devaluar el peso sin desatar el peligro de la hiperinflación. Del mismo modo, las devaluaciones del euro y del real postergan por tiempo indefinido la posibilidad de que China revalorice su moneda, el yuan, y facilite de este modo las ventas de Argentina. Al revés: China se ha puesto a la cabeza del pelotón que busca derribar los precios internacionales de las materias primas que adquiere, y además industrializar en su país los productos que se elaboran con esas materias primas. Mientras Kirchner y Macri pelean por endilgarse la copa del mundo del espionaje y la conspiración, la crisis mundial le mueve el piso a los dos –como una danza en el Titanic. Solamente en las últimas dos semanas, Brasil ha visto como se le evaporaban 12 mil millones de dólares de sus reservas como consecuencia de la fuga de capitales. Los K deberían poner sus barbas en remojo.

La clase obrera frente al Bicentenario

La clase obrera no celebra el Bicentenario con slogans patrioteros sino con una vigorosa lucha sindical. La pelea de las fábricas de la Alimentación de Córdoba ha desarrollado un nuevo foco de reagrupamiento independiente de los trabajadores. La transición histórica del régimen de sindicalismo estatizado, por medio de una burocracia, hacia un sindicalismo de clase va ganado nuevos espacios sociales y geográficos –y, por supuesto, nuevos reclutas.

Lo ocurrido en los últimos meses en la Alimentación se va a reproducir entre los trabajadores de Supermercados y, dentro de poco, entre los trabajadores de Smata y de nuevo en metalúrgicos. El 25 de Mayo de 1810 fue un producto distorsionado y manipulado de los grandes levantamientos que acogieron a las Invasiones Inglesas –y del otro lado del océano, del levantamiento nacional español del 2 de Mayo de 1808. La irrupción nacional en las Provincias Unidas estuvo determinada por una crisis mundial excepcional y por la aparición de situaciones revolucionarias en las colonias americanas y en la metrópoli española. A doscientos años de distancia, nos enfrentamos a una crisis mundial un millón de veces más grande y al desarrollo de luchas populares y crisis políticas que conducen a situaciones revolucionarias. El lugar del pueblo raso, a principios del siglo XIX, lo debe ocupar el proletariado. Los focos de lucha clasista que se desarrollan en el país deben servir para colocar a la clase obrera a la cabeza de una nueva revolución –que para ser auténticamente nacional deberá tener un carácter socialista. Una revolución que ponga en pie una Federación socialista de América Latina y se proyecte hacia una República Socialista internacional.

bicentenario

1810-2010: un nuevo escenario histórico de crisis y revoluciones



Mayo de 1810 no fue un hecho aislado. Como todo el proceso independentista de América Latina es parte del ciclo histórico de la revolución burguesa: el de la emancipación de las colonias inglesas en 1776 y el de la Francia de 1789, dos grandes acontecimientos que tuvieron una influencia muy marcada en las rebeliones del sur del continente americano.

Crisis mundial (I)

El sistema colonial había crecido al amparo de una nueva era histórica y se agotó como parte de una etapa de crisis y revoluciones. Las colonias norteamericanas buscaron un camino propio cuando desde Londres se las asfixiaba con una confiscación impositiva intolerable, que tenía la finalidad de reconstituir las finanzas inglesas luego de una prolongada guerra con Francia. Del mismo modo, las colonias del sur buscaban quebrar el asfixiante monopolio hispano, que le vedaba un acceso independiente al mercado mundial, en expansión bajo los efectos de la revolución industrial. El desarrollo general de las fuerzas productivas, que el sistema colonial había contribuido a desarrollar, había encontrado su límite. El desarrollo del mercado mundial a partir del descubrimiento de América y el comercio a larga distancia fueron la condición de la industria moderna que revolucionó la capacidad productiva de la humanidad.

Las contradicciones del sistema colonial estallaron al calor de una crisis mundial que tuvo por centro a sus metrópolis. El detonante fue la invasión de España por Napoleón, que buscaba crear un sistema continental protegido contra la competencia inglesa. La invasión napoleónica dejó a toda la administración colonial hispana colgada del pincel. Fue la oportunidad para que la débil burguesía rioplatense (estancieros y comerciantes) y la pequeña burguesía criolla que pretendía encarnar el espíritu de la época formaran la primera “junta” (denominación tomada de las “juntas” que se constituían en España contra el régimen de los invasores franceses), liquidando a la desgastada burocracia virreinal.

La necesidad y la contingencia impulsaron una revolución en las despobladas pampas, en la comarca más lejana del imperio colonial español. El centro vital de éste era el Alto Perú, que en ese mismo momento comenzaba una declinación irreversible, luego de haber regado con oro y plata la acumulación de capital en Europa. Treinta años antes de 1810, la verdadera masa explotada, los indígenas de las minas y campos, se levantó contra el explotador colonial con Tupac Amaru en el Alto Perú, con los comuneros en Nueva Granada. Estos levantamientos marcaron el límite histórico de las oligarquías criollas, que se espantaron con el accionar del pueblo insurgente. Estas mismas oligarquías le dieron el contenido histórico de clase al movimiento de la independencia ríoplatense, que se plasmó en el régimen de la estancia y en la balcanización de Sudamérica.

Crisis mundial (II)

Nuestro Mayo se presentó al mundo en una etapa de crisis y revoluciones que marca el período que conduce al apogeo de la civilización burguesa. Su límite histórico quedará expuesto en el curso del siglo XIX, con las revoluciones europeas del 48 y el final de la guerra civil norteamericana en 1861. Diez años después, será el alba de un nuevo ciclo histórico, el que anticipa la gesta de la Comuna de París en 1871. Luego, bajo la presión de una gigantesca depresión capitalista mundial, el proletariado forjará sus partidos de masas y su Internacional. Esa crisis mundial abre paso también a la época del imperialismo capitalista. En 1890 esa crisis mundial llevó a la Argentina a la bancarrota y abrió la vía a un nuevo protagonista histórico en nuestro suelo: el proletariado, que con sus luchas marcará todo el período previo al Centenario, cuando la oligarquía terrateniente festejaba su condición de semicolonia de Inglaterra.

En el Bicentenario, la historia nos encuentra en una nueva bisagra histórica -una nueva etapa de crisis y revoluciones, que ahora cubre la etapa senil del capital.

América Latina no reunió las condiciones para desarrollar una nación, según la trayectoria que marcaron las colonias norteamericanas -que de todos modos necesitaron un levantamiento nacional (1776) y una enorme guerra civil en la sexta década del 800. Mientras la burguesía industrial norteamericana empleaba las armas para acabar con el sur esclavista, la oligarquía de los terratenientes y comerciantes pro-ingleses libraban una guerra de esclavización contra pueblo de Paraguay y para consolidar definitivamente la estructura semi-colonial del espacio rioplatense. Lo que no logró en el período de formación de los Estados nacionales, se sigue presentando, sin embargo, como una tarea histórica pendiente en el período de ladescomposición de esos Estados nacionales y de decadencia histórica del capitalismo. Es por eso que sobrepasa las posibilidades de la burguesía nacional y de su expresión política -el nacionalismo burgués. Argentina fue, en el siglo XX, el territorio de una amplia experiencia de nacionalismo burgués, del yrigoyenismo al peronismo, que fracasó en conquistar la independencia nacional, que no puede ser otra que la unidad de América Latina. La expresión de este fracaso está a la vista en la posición marginal que ocupa en la economía y política mundiales, y en su colonización por el capital financiero. El peronismo acabó creando a la Triple A. Otra expresión política la encontramos en el kirchnerismo, esa farsa que protagoniza la historia cuando quiere repetirse. En lugar de misiones revolucionarias hacia Paraguay y el Alto Perú, tenemos el Fondo del Endeudamiento.

El Bicentenario nos encuentra ante una nueva crisis mundial, en la época de declinación del capitalismo. Provocará, como ya lo hace, crisis políticas y levantamientos populares, y crisis internacionales. Se trata de cambiar la historia en forma radical, para terminar con la explotación y las guerras. Para afrontar sus responsabilidades históricas, la clase obrera mundial necesita desarrollar su independencia política y construir partidos obreros revolucionarios.

Pablo Rieznik-Jorge Altamira

11/5/10

FACULTAD DE CS SALUD Y TRABAJO SOCIAL - UNMDP

EN CS. SALUD GOBIERNA UNA CAMARILLA PRIVATISTA Y FRAUDULENTA

La intención de reformar el plan de estudios en la Facultad de Ciencias de la Salud, con fondos otorgados a través del PROSOC ha generado una fenomenal crisis política debido a que la reforma está basada en el nombramiento de docentes en niveles superiores como son JTP (Jefes de Trabajos Prácticos) hacia arriba, titulares, adjuntos con dedicación exclusiva, etc.-

Esto supone, por un lado ignorar el estado actual de situación en el que se encuentra la planta docente, con ayudantías concursables todos los años (jamás estabilidad en el cargo), con gran cantidad de ayudantes “ad honorem” trabajando gratis. Nada de esto ha sido tenido en cuenta por estos docentes que se han auto designado, en cargos superiores, a través de este proyecto; Y por otro lado, pretenden imponer la reforma del plan de estudios a través de un proyecto no discutido con los estudiantes.-

Mucho se ha discutido sobre la forma, es decir el procedimiento fraudulento que se dio esta camarilla docente para hacerse beneficiaria de estos fondos. Desde la UJS-PO denunciamos este fraude escandaloso. Sin embargo poco se ha discutido sobre el fondo del asunto: el PROSOC, un programa del gobierno nacional que consiste en un ataque directo a la autonomía universitaria al pretender la reforma del plan de estudio de acuerdo a los contenidos que dicte el gobierno nacional a espaldas de los estudiantes. Este programa apunta a una privatización encubierta mediante el vaciamiento de los contenidos de las carreras de grado y su traspaso a los posgrados arancelados. Es la aplicación de la Ley de Educación Superior menemista.

Esto se da en el marco de una facultad que intervenida y que en el corto plazo esta prevista la convocatoria a elección de decano. Por esta razón ha tenido tanta difusión el tema entre algunas agrupaciones de “oposición” y entre distintos sectores del claustro docente, los cuales están utilizando abiertamente la situación para posicionarse y tener “su lugar” en la futura gestión.

Por esto llamamos a todos los estudiantes a organizarnos de manera independiente de las camarillas docentes, para defender la educación pública, gratuita, de calidad y al servicio de los trabajadores.

Desde la UJS-PARTIDO OBRERO, plantemos:

· Que los planes de estudios se modifiquen sobre la base de una discusión abierta entre docentes, estudiantes y no docentes, en comisiones con igual número.-

· Fuera las camarillas privatistas y vaciadoras de Salud. Renuncia inmediata del Jefe de Departamento y de los docentes que forman parte de este proyecto.

· En defensa de la educación pública, gratuita, de calidad y al servicio de los trabajadores. Triplicación del presupuesto universitario.


El Partido Obrero frente a la crisis política y el paro rural

Este es el link para ver los diferentes videos del partido obrero